Las tres grandes aseguradoras que forman parte de la oferta para los funcionarios de Muface están dando marcha atrás y han vuelto a incluir la cobertura de oncología médica y radioterapia para los pacientes de Muface en Madrid. Además de incluir de nuevo el Hospital Universitario Quirón. Según fuentes sanitarias, también los centros de HM Hospitales podrían volver a incorporarse a la oferta de Adeslas para los funcionarios de Muface.
«Funcionarios, policías y militares empiezan a recuperar parte de la oferta sanitaria que perdieron a principios de año, cuando las aseguradoras de Muface recortaron la cartera de médicos y especialidades a los que pueden acudir y pacientes con cáncer tuvieron que cambiar de centro. Los 250.000 beneficiarios de Muface en Madrid vuelven a tener cobe
Los problemas de los funcionarios con la prestación sanitaria a través de Muface saltaron a la opinión pública cuando se empezaron a registrar quejas de afectados por cáncer que vieron interrumpido su tratamiento. Las tres grandes aseguradoras privadas que este año han firmado el concierto con Muface (Adeslas, Asisa y DKV) recortaron en enero su cartera de médicos y hospitales, de forma que especialidades e incluso centros enteros quedaron fuera de la oferta. Eso provocó que personas ya en tratamiento tuvieran que cambiar de hospital o se vieran obligadas a solicitar autorizaciones para cada una de las pruebas o las consultas que necesitaran.
Una de estas tres aseguradoras, Adeslas, ha sido la primera en dar marcha atrás y ha vuelto a incluir la cobertura de oncología médica y radioterapia para los pacientes de Muface en Madrid. “El hospital universitario Quirón Madrid vuelve a tener concierto con Adeslas para el colectivo de funcionarios”, asegura una circular a la que ha tenido acceso EL PAÍS. Estas especialidades dejaron de estar cubiertas en enero, lo que dejó en un limbo a pacientes ya en tratamiento. Por ejemplo, una policía nacional de 53 años con un cáncer de ovarios relató a este diario la incertidumbre y el enredo burocrático que vivió entre un ciclo de quimioterapia y otro sin saber en qué hospital la tratarían.»
Fuente: www.elpais.com