Un snack saludable que no necesita cocinado
Si bien comer entre horas no es lo más recomendable desde el punto de vista nutricional, no todos los alimentos son iguales. Existen opciones que no solo sacian el apetito, sino que además ofrecen múltiples beneficios para la salud. Las frutas y los frutos secos, como las nueces, son ejemplos de ello.
Sin embargo, hay otro alimento que cada vez gana más protagonismo: los altramuces. Además de ser un clásico aperitivo, los altramuces destacan por su capacidad para reducir el colesterol, mejorar la salud intestinal y contribuir a la regulación de la glucosa. Y lo mejor: no requieren cocinado.
Propiedades nutricionales destacadas
Según la especialista Natalia Sirvent, que comparte contenido en redes sociales bajo el perfil @nataliasipra, «100 gramos de altramuces contienen más proteínas que dos huevos medianos», lo que ya da una idea del valor nutricional de este alimento.
Estas pequeñas semillas amarillas tienen un sabor característico, ligeramente amargo y salado, que las convierte en un snack muy versátil y sabroso. Pero lo más interesante son sus propiedades para la salud:
- Ricos en proteínas vegetales: ideales para dietas vegetarianas o altas en proteína.
- Fuente de minerales: contienen magnesio, hierro y calcio.
- Bajo índice glucémico: ayudan a mantener niveles estables de azúcar en sangre.
- Altos en fibra: favorecen la salud digestiva y ayudan a controlar el peso.
- Efecto prebiótico: promueven el crecimiento de bacterias beneficiosas en el intestino.
Un snack que sacia y apenas aporta calorías
Una de las ventajas de los altramuces es su capacidad para saciar rápidamente gracias a su contenido en fibra y proteínas. Además, tienen un bajo contenido calórico, lo que los convierte en una excelente opción para quienes buscan cuidar su alimentación sin renunciar a un aperitivo entre horas.
En definitiva, incluir altramuces en tu dieta es una manera sencilla y eficaz de mejorar tu salud cardiovascular, cuidar tu microbiota y mantener la energía estable durante el día.