Mantener la sanidad privada es una ventaja, especialmente por el respaldo que supone para el sistema nacional de salud pública. Por eso, es posible que en un futuro los incentivos fiscales podrían ser una realidad, y con ellos una sanidad privada asequible.
Insurance Europe ha trasladado varios planteamientos a la Comisión Europea sobre el acceso a cuidados a largo plazo asequibles y de alta calidad en materia de salud. Como antecedente, subrayan el papel de las aseguradoras en muchos estados miembros complementando los sistemas nacionales de salud con cobertura privada, lo que «alivia la presión sobre esos sistemas». Y en ese entorno ese papel podría aumentar en el futuro y ganar importancia ante el envejecimiento de la población de Europa y los desafíos que genera para garantizar que los ciudadanos tengan acceso a una atención médica asequible en la vejez.
Pero para que las aseguradoras tengan ese papel más importante, Insurance Europe cree que se deben cumplir varias condiciones. Una de ellas se refiere a los incentivos fiscales, que «podrían ayudar a garantizar que los productos de seguros sigan siendo asequibles y atractivos. Además, las aseguradoras están dispuestas a explorar con las autoridades cómo podría evolucionar su función».
Además, cree que las aseguradoras podrían servir como puerta de entrada a los servicios de salud, especialmente aquellos que fomentan «la prevención, la concienciación y la adaptación, que son áreas en las que las aseguradoras tienen una experiencia significativa y que son vitales para mantener los costes de atención médica asequibles».
Por último, afirma que la CE también podría alentar a los estados miembros a desarrollar enfoques para reducir las presiones sobre los sistemas de salud y promover la prevención, los estilos de vida saludables y el uso adecuado de las soluciones digitales.
Fuente: www.grupoaseguranza.com
